► “En este
joven solitario, sin afectos, sin alegrías, debe darse una gran tortura interior,
una disidencia terrible que lo ha conducido a hacerse, interiormente, casi de
modo inconsciente, apóstol y asceta. Su tortura ha comenzado con sus
condiciones físicas: es jorobado y está consumido por enfermedades nerviosas.
Ésta su vida constantemente pura y seria ha hecho, desde luego, que en Turín,
aunque no sea renombrado públicamente tenga, empero, una influencia grandísima
en todos los ambientes socialistas y la sección turinesa siga sus directivas.
Por él todos los jóvenes socialistas tienen una admiración y una fe
entusiastas. Intransigente, hombre de partido, a veces casi feroz, ejercita su
crítica también en contra de sus compañeros, no por polémica personal o
cultural, sino por una necesidad insaciable de sinceridad. En el partido cumple
una función de verdadera moralidad.” | Piero Gobetti, carta
a Giuseppe Prezzolini del 25/VI/1920, Carteggio. 1918-1922
