
El futuro desde 1927 en adelante fue sombrío, las ultimas
purgas llegaron y Gramsci no fue la excepción. Fue sentenciado a 20 años, 4
meses y 5 cinco días. Finalmente es trasladado a la cárcel de Turín, allí la
enfermedad le llego rápidamente, sin embargo entre dolencia su mente supo
entender que la hegemonía de la clase dominante sobre las dinámicas culturales
era el germen de la opresión a que eran sometidas las mayorías poblacionales.
Haciendo un contexto del entrono intelectual de la niñez y
juventud de Gramsci en La Italia de finales del siglo XIX y principios del XX
se puede observar el ambiente que se vivía con importantes debates académicos e
intelectuales que incidieron decisivamente en las dinámicas políticas del país.
Las contradicciones en las ideas y las amistades intelectuales de los que daban
pautas al iniciar el siglo XX: Antonio Labriola, Goerge Sorel y Benedetto
Croce, por ejemplo, quienes exploraron la histórica acumulación intelectual
románico-italiana y el marxismo. Benedetto Croce pasaría por muchos años de
convulsión a ser un referente de los círculos de intelectuales, ganaba las
simpatías de críticos visitantes extranjeros como fue el caso del peruano Carlos
Mariattegui, entre 1920 y 1923.
El mismo Antonio Gramci en plena guerra, 1917, dijo sobre
Croce: “il piugrande pensatore dell Europa in questo momento”. Mussolini en
1922 se hacía llamar un seguidor de las ideas del “maestro” Sorel, sin embargo
su giro hacia el nacionalismo y optar por la violencia de Estado contra el
libre pensamiento fue el camino a seguir para proteger a las elites dominantes.
De esa manera en nombre del orgullo románico, los “Fascistas”, arremetieron
asesinando, torturando y encarcelando a los opositores socialistas, liberales y
principalmente a los intelectuales pensadores que influían en los círculos
académicos y en algunos sectores de las clases medias. Aunque Mussolini leía
detenidamente los escritos del intelectual Croce, quien tuvo que actuar
estratégicamente, manteniendo una labor intelectual y haciendo critica si caer
en la radicalidad, de lo contrario Mussolini lo hubiera detenido
inmediatamente.
Mientras afuera las polémicas de orden filosófico tenia la
tendencia entre neotomistas y los auttualisti, o principalmente entre los
católicos y los seguidores de Croce. Pero en esencia esto no perjudicaba al
régimen dictatorial fascista, en la cárcel de Turin Antonio Gramsci enfermo y
maltratado desarrollaba a través de cortos ensayos y cartas ideas que tiempo
después de su muerte y del fin de la Segunda Guerra Mundial revolucionarían en
el pensamiento marxista contemporáneo en el seno de las academias y de círculos
intelectuales y políticos.
La obra de Gramsci tuvo la suficiente madurez en sus años de
encierro, no lo podían ver la ciegas mentes opresoras de régimen fascista
cuando exclamaron durante el juicio “por 20 años debemos impedir a este cerebro
funcionar”. La madurez intelectual de Gramsci lo llevo a la comprensión del
materialismo histórico a niveles de análisis mas allá de los determinismos
políticos, supo interpretar que la cultura de una sociedad es regida por la
clase dominante. Lanzó al futuro desde una celda premisas de que el camino es
la construcción de leguajes culturales liberadores para enfrentar la
superestructura ideológica del sistema.
La madurez con que entendió al marxismo la dejó plasmada en
uno de sus cortos escritos: “…a nosotros los marxistas nos tildan de ver a Marx
como un mesías, pero para nosotros Marx es madurez intelectual”. La madurez de
comprender el los legados del conocimiento humano para construir mejores
senderos para un mundo en el borde del abismo es una urgencia, es vital que
nuestra Honduras avance ya no de la mano centenaria de la ignorancia y atraso
mental, es hora de seguir trabajando por liberarla…