
1. ¿La alineación: categoría
filosófico-antropológica o categoría socioeconómica? Este es el
punto más candente y el más general de todos. Puede decirse que todos los otros
puntos están incluidos en éste o se derivan de él. Tome el lector en cuenta lo
siguiente: en caso de ser la alienación una categoría filosófica, un rasgo
“antropológico” del ser humano por así decirlo, no queda otro remedio que
separar la teoría de la alienación de todo el sistema socioeconómico de Marx, o
sea, de su comprensión de la historia, ya que esta comprensión excluye por
definición toda categoría de carácter histórico; en este caso, la alienación no
sería otra cosa que una especie de pecado de juventud de Marx, o como se ha
dicho, “un concepto premarxista e ideológico”. Por otra parte, si se concibe a
la alienación como categoría socioeconómica (de consecuencias éticas) se niega
de raíz la posición anterior, pero entonces habrá que demostrar no sólo la
persistencia de la teoría, y su vocabulario, a lo largo de la obra de Marx,
sino lo que es más importante: demostrar su lugar preciso dentro de la
concepción socioeconómica de Marx.