
La situación de Antonio Gramsci durante los once años que
permanece en la Cárcel, objeto de la implacable persecución fascista y el odio
de Mussolini, debió ser, sin lugar a dudas, muy penosa, sin embargo también
podría decirse que marca condiciones, como aquella de no estar urgido por la
coyuntura, ni por las conveniencias de las tácticas momentáneas, que le
permitieron desarrollar y templar sus ideas.
En sus textos utiliza varias imágenes para describir esta
difícil