
David Brooks
Todo político aquí justifica cualquier cosa con la frase por el bien de los niños: reducir el déficit, lanzar las guerras contra el terrorismo y las drogas, promover iniciativas de seguridad doméstica y reformar (léase privatizar) la educación y más es para bien de las nuevas generaciones. Los resultados de sus políticas no coinciden con tan buenos y nobles deseos. Uno de cada cinco menores de edad en Estados Unidos vive en la pobreza, y millones más ingresaron a esas filas en la recesión económica, incrementando en 10 por ciento los que viven en pobreza, el salto más grande en un año desde 1960, reporta el Fondo de Defensa de los Niños en su último informe anual El estado de los niños de Estados Unidos 2011.