Dos autores, Ralph René, del libro “20 grandes conspiraciones de la historia” de Santiago Camacho (Ralph René: 31 Burgess Place Passaic NJ 07055 EEUU) y del libro de Bill Kaysing “We never went to the moon: America’s thirty billion dollar swindle” (Bill Kaysing: P.O. Box 595 Frazier Park Ca. 93225 EE UU), llegaron a la siguiente conclusion:
La NASA, actuando en estrecha colaboración con la DIA (Agencia de Inteligencia de la Defensa) –el mayor cuerpo de la inteligencia estadounidense- organizó una operación de alto secreto denominada ASP (Apollo Simulation Project) que desarrollaba el fraude.
Las tomas falsas fueron rodadas en la base Norton de la fuerza aérea, en San Bernardino, California: “Allí contaban con más y mejor equipo técnico y humano que todos los estudios de Hollywood juntos”, explica Kaysing, añadiendo que el hombre encargado del peculiar rodaje fue el director Stanley Kubrick, cuya película 2001: Una Odisea del Espacio (1968) había impresionado a los oficiales de la NASA, que le pusieron al mando de la parte técnica de la operación. Puede sonar descabellado, pero Kubrick siempre rehusó contestar a cualquier pregunta sobre el tema, una actitud habitual en los implicados en este curioso asunto.