Juan Gris [España] Violín y guitarra
Jordi Soler Alomá
Cuando prácticamente tenía terminada la segunda parte de mi análisis de la crítica de la dialéctica de Marx por parte de Sacristán ha aparecido en Rebelión (16/07/2010) una crítica a mi crítica, por parte de Salvador López Arnal, quien conoce muy bien la obra de aquél. Pienso que conviene, antes que nada, darle respuesta.
Vaya por delante que no discuto los méritos de Manuel Sacristán, tanto los que aduce SLA en el ámbito académico, que son sobradamente conocidos, como los que le distinguieron como persona honesta y coherente. Mis observaciones recaen sobre el hecho de que la crítica de la dialéctica de Marx por Sacristán no está bien fundamentada ni bien argumentada y, por lo tanto, no tiene validez. Es el mismo tipo de crítica en la que se empantana, por ejemplo, Mario Bunge: más que críticas (en el sentido etimológico de la palabra kriticós, que significaba juicio objetivo, fundamentado y desinteresado) son simples opiniones, en el caso de Sacristán, si se quiere, mejor vestidas.
Siguiendo el hilo de la crítica de SLA, me veré obligado a tener que recalar de vez en cuando en la anécdota: como, por ejemplo, cuando presta atención al hecho que aduzco de la percepción de Althusser y Sacristán como gurúes del marxismo. Bien, es un modo metafórico de decirlo (también hubiera podido decir “iconos” o cualquier otra expresión equivalente. En cualquier caso no me parece relevante, y no entiendo como SLA puede reparar en tamaña trivialidad, como no sea por un malentendido). En todo caso, si mi expresión resulta ofensiva, no tengo el menor reparo en retirarla, ya que no es elemento de mi análisis.